NOELIA

Thursday, September 28, 2006

...El ARTE PARA LOS NIÑOS...

Ella estaba sentada en una silla alta, ante un plato de sopa que le llegaba a la atura de los ojos. Tenia la naríz fruncida y los dientes apretados y los brazos cruzados. La madre pidió auxilio:
_ Cuéntale un cuento, Onelio -pidió-. cuentale tú que eres escritor.
Y Onelio Jorge Cardoso, esgrimiendo una cucharada de sopa, comenzó su relato:
_
Había una vez una pajarita que no quería comer la comidita. La pajarita tenía el piquito cerradito, cerradito, y la mamita le decia le decía: Te vas a quedar enanita, pajarita, si no comes la comidita. Pero la pajarita no hacía caso a la mamita y no habría su piquito.
Y entonces la niña lo interrumpió:
_ Que pajarita de mierdita -opinó.



Eduardo. Galeano

Tuesday, September 12, 2006

Bueno antes de empezar quiero pedirles disculpas a todos por no visitarlos seguido, la razón fue porque estuve una semana de viaje y la otra porque no tuve mucho tiempo por el estudio! Igual de todos modos estuve curosiando sus lugares pero no he dejado mis comentarios porque quería leerlos tranquila y no a las apuradas!
Yo cada vez que viajo es como que me despejo, y me olvido de algunos problemas y cuando vuelvo tengo que retomar la rutina y por ahí tratar de hacer algo diferente para que no se me pasen tan aburridos y lentos los días, yo creo que todos tratamos de hacer eso… es así.
En mi vida pase por muchísimas experiencias buenas y malas, experiencias que dejaron un significado en mi vida, experiencias que me hicieron crecer como persona, experiencias, experiencias!
Y ahora voy a pasar a contarles una que me toco vivir hace poquito estando en Buenos Aires.
Resulta que hay un bar que queda en el partido de Morón, bar que me encanta y estimo mucho a la gente que trabaja ahí, tuve oportunidad de conversar con estas personas y la verdad que son excelentes.
Yo estaba en capital pero para llegar tuve que tomar un tren que me dejara en morón.
Cuando uno sube a un tren, a un colectivo o subte siempre se encuentra con vendedores que suben para ofrecer los productos que venden. Unas de las cosas que me caracterizan como persona es ser muy despistada. Estaba sentada mirando por la ventana pensando en todo lo que tenía que hacer al llegar a La Rioja. Y veo que una manito me deja una tarjetita en mi pierna la miro, en la parte del frente tenia un dibujito, la doy vuelta y tenia un mensaje que si mal no recuerdo decía: “Me gusta la cinta verde porque es el color esperanza, arrímate no me tengas desconfianza” me di vuelta y no había nadie, quede desconcertada por un momento, hasta que veo que venia un nene retirando las tarjetitas que había entregado a personas. Algunas de ellas se las devolvía y otras se quedaban con ella y le daban moneditas. Hasta que veo que el nene se me acerca y le di las monedas y este nene me mira muy fijo, me sonrió y me dijo: muchas gracias, gracias. En ese momento quede mirándolo un rato mientras se alejaba, nunca en mi vida vi un nene con una mirada tan dulce y a la vez tan triste, esa criatura me toco el alma.
Cuando bajo del tren vi que estaba sentadito en el piso, me acerque y le y le dije: _discúlpame, vos me diste la tarjetita esta. El con su cabecita me decía si…y le pregunte: te puedo dar un abrazo? El nene me dice: si.
Lo abrace y le di un beso.
En si ver a un niño trabajando en la calle, durmiendo en el piso de una vereda, buscando comida en bolsas de basura, no me parte el alma, me la destruye. Y me da tanta impotencia no poder hacer nada más que darle monedas, no entiendo como esas cosas hoy en día las ve en toda partes, no entiendo como un niño así se ve obligado a trabajar para muchas veces llevar el pan a su casa, dejando de vivir su infancia para cumplir un rol de adulto. Es muy cruel.
Solo espero que estas cosas se terminen algún día. Solo espero eso.